El divorcio y el dios de la música
Tabla de contenidos en Como en los días de Noé
- Cristianismo sin sangre
- La exaltación de la sensualidad
- El divorcio y el dios de la música
Mat 24:38 Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento…
He aquí una característica más de los días de Noé, época que el Señor comparó con los tiempos previos a su segunda y ahora inminente venida: el casi nulo valor que se le da al compromiso matrimonial. Cuando Jesús dijo que en los días de Noé la gente estaba casándose y dándose en casamiento, se refería a personas que se casaban y se separaban una y otra vez de diversas parejas.
El plan original de Dios al respecto se vio afectado por la corrupción moral del hombre como podemos leerlo desde los primeros días de la humanidad:
Gen 4:19 Y Lamec tomó para sí dos mujeres; el nombre de la una fue Ada, y el nombre de la otra, Zila.
Esta es la primera transgresión de la ley del matrimonio y el vestigio más antiguo de la práctica de la poligamia. Es un claro atentado contra el matrimonio instituido por Dios.
I.- Del matrimonio, creado por Dios.
Gen 2:21-23 Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre. Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada.
Versión Dios Habla Hoy (DHH)
Gen 2:21-23 Entonces Dios el Señor hizo caer al hombre en un sueño profundo y, mientras dormía, le sacó una de las costillas y le cerró otra vez la carne. De esa costilla Dios el Señor hizo una mujer, y se la presentó al hombre, el cual, al verla, dijo: “¡Esta sí que es de mi propia carne y de mis propios huesos! Se va a llamar ‘mujer’, porque Dios la sacó del hombre.”
El valor de esta institución que Dios establece en el principio, es confirmado y sancionado a lo largo de la Biblia.
Heb 13:4 Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios.
Versión Biblia Al Día (BAD)
Heb 13:4 Tened todos en alta estima el matrimonio y la fidelidad conyugal, porque Dios juzgará a los adúlteros y a todos los que cometen inmoralidades sexuales.
Sin embargo, las evidencias hablan de que los seres humanos le dan conceden cada vez menos valor al matrimonio, lo que se confirma simplemente revisando la incidencia de divorcios en la actualidad.
Se sabe que en México, en 1970, se divorciaban tres de cada cien parejas. Para 2005 ya eran doce de cada cien.
Para 2008, son 45 de cada 100 las mujeres que tienen a su primer hijo sin haberse casado, lo que muestra un desprecio por la institución matrimonial. Es decir, casi la mitad de los niños mexicanos que nacen cada año, carecerán de los beneficios de vivir con ambos padres, unidos en matrimonio.
Y, en el colmo del desdén por la institución matrimonial, recientemente se ha aprobado en nuestro país el llamado “divorcio express“, que permite a una pareja que se pone de acuerdo separarse legalmente en un término máximo de ocho días, enterrando así cualquier posibilidad de reflexión sobre los efectos de la separación conyugal.
Esto producirá, además, generaciones cada vez más propensas a recurrir al divorcio y al nuevo casamiento, dado el ejemplo que han recibido de sus padres.
Hermanos: ¡la profecía de Jesús sobre los tiempos finales se está cumpliendo delante de nuestros ojos!
Lo más grave es que el divorcio también se está volviendo una práctica común entre los cristianos evangélicos. No hace mucho tiempo, el índice de separaciones conyugales en la iglesia cristiana era casi nulo, mas hoy es una verdadera plaga. Sin ir más lejos, yo mismo recibo numerosos mensajes de correo electrónico de cristianos que buscan mi aprobación para divorciarse de su pareja, como si fuera yo y no la Palabra de Dios quien establece parámetros al respecto.
Y el número de divorcio crece no sólo entre congregantes, sino también entre líderes y pastores, como lo señale este reporte que reproduzco de la páginawww.despuesdeldomingo.com/2007/09/20/pastores-divorciados/, del 20 de septiembre de 2007.
Por mucho tiempo el divorcio marcó el final del pastorado para muchos ministros. Hoy día la postura de las principales denominaciones con respecto a este asunto se ha ablandado de tal manera, que cada día vemos más pastores divorciados en las iglesias de todo el país. Este es un tema del cual no se habla mucho, pero es alarmante la cantidad de pastores que continúan dirigiendo sus congregaciones a pesar de su fracaso matrimonial.
La lista a continuación contiene los nombres de algunos famosos tele- evangelistas divorciados, los cuales siguen activos en sus ministerios, o sea al frente de sus iglesias y predicando en la televisión. Estos son los más conocidos, pero les aseguro que este fenómeno está ocurriendo en todos los niveles y a través de todas las denominaciones evangélicas.
Jim Bakker – Ex-director del ministerio PTL. Su matrimonio con Tammy Faye terminó en 1992. Casado nuevamente.
John Hagee – Pastor de la iglesia Cornerstone Church en San Antonio. Su primer matrimonio terminó en1975. Se casó al año siguiente.
Noel Jones – Pastor, de la iglesia City of Refuge Church cerca de Los Angeles. Divorciado a principio de1990. Continúa soltero.
Clarence McClendon – Pastor de Full Harvest International Church, en el sur de California. Divorciado después de 16 años de matrimonio. Casado nuevamente.
Joyce Meyer – Dirige el ministerio Joyce Meyer Ministries. Se divorció de su primer esposo en 1966 y se volvió a casar en 1967.
Robert A. Schuller – Pastor Senior de Crystal Cathedral Ministries (Ministerios de la Catedral de Cristal) en el sur de California. Divorciado en 1984. Se volvió a casar el mismo año.
Charles Stanley – Pastor Senior de First Baptist Church of Atlanta. Su matrimonio terminó en año 2000 después de 44 años de casado. Continúa soltero.
Robert Tilton – Ex lider de la iglesia Word of Faith World Outreach Center Church. Divorciado dos veces. Vuelto a casar.
¿Qué creen ustedes?
En realidad no estamos discutiendo aquí si, en cada caso, el divorcio es legítimo o no. El tema es que esta ola de divorcios y este desprecio de la institución matrimonial es una de las características tanto de los días de Noé como de nuestros días. Aún los cristianos, como se ve, cada vez afirman menos su matrimonio en Cristo y en su Palabra.
II- Del dios de la música.
Veamos cómo la música era más importante que Dios y su Palabra en los días de Noé. Lo comprobamos por el linaje de Jubal:
Gen 4:21 Y el nombre de su hermano fue Jubal, el cual fue padre de todos los que tocan arpa y flauta.
La Biblia habla de Jubal como el primer músico en la tierra. Su nombre significa “arroyo que fluye”, sólo que la música de Jubal no era un río que fluía hacia Dios, sino que se enfocaba en complacer los sentidos.
Revisemos esta historia. Hay en el Génesis dos hombres llamados Enoc: el primero fue hijo de Caín.
Gen 4:17 Y conoció Caín a su mujer, la cual concibió y dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad, y llamó el nombre de la ciudad del nombre de su hijo, Enoc.
El segundo fue hijo de Jared y padre de Matusalén:
Gen 5:18 Vivió Jared ciento sesenta y dos años, y engendró a Enoc.
Gen 5:21 Vivió Enoc sesenta y cinco años, y engendró a Matusalén.
Enoc significa consagrado. El primer Enoc, hijo de Caín, se consagró al mundo y a los placeres, y su música fue sensual para acompañar los deseos de la carne. El otro Enoc, el hijo de Jared, se consagró a Dios a tal grado que no vio muerte, sino que Dios lo arrebató:
Gen 5:24 Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios.
Hubo pues dos Enoc, dos consagrados, uno al mundo y otro a Dios. El mismo nombre, pero con distinto fin, tal como se lee en Apocalipsis:
Apo 3:1 Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: El que tiene los siete espíritus de Dios, y las siete estrellas, dice esto: Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto.
Así pues, con dos Enoc, hay claramente dos linajes, uno de maldad y uno de piedad. Veamos ahora el linaje de Jubal.
Gen 4:17-18 Y conoció Caín a su mujer, la cual concibió y dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad, y llamó el nombre de la ciudad del nombre de su hijo, Enoc.
Gen 4:18 Y a Enoc le nació Irad (que significa fugitivo), e Irad engendró a Mehujael (que significa golpear), y Mehujael engendró a Metusael (que significa incierto), y Metusael engendró a Lamec.(de origen arábigo que significa joven fuerte).
Los nombres de los de este linaje hablan todos de la confianza en sí mismos, de hombres que pretenden ser autosuficientes, de soberbia
Gen 4:19 Y Lamec tomó para sí dos mujeres; el nombre de la una fue Ada (placer o belleza) y el nombre de la otra, Zila (sombra, oscuridad)
Gen 4:20 Y Ada dio a luz a Jabal, (quien se desliza o resbala), el cual fue padre de los que habitan en tiendas y crían ganados.
Gen 4:21 Y el nombre de su hermano fue Jubal, (arroyo que corre, que fluye), el cual fue padre de todos los que tocan arpa y flauta.
Gen 4:22 Y Zila (sombra, oscuridad) también dio a luz a Tubal-Caín (confusión), artífice de toda obra de bronce y de hierro; y la hermana de Tubal-caín fue Naama (alegre, placentera).
Gen 4:23-24 Y dijo Lamec a sus mujeres: (y lo dijo cantando, acompañado por Jubal como guitarrista)
Ada y Zila, oíd mi voz;
Mujeres de Lamec, escuchad mi dicho:
Que un varón mataré por mi herida,
Y un joven por mi golpe.
Si siete veces será vengado Caín,
Lamec en verdad setenta veces siete lo será.
Leamos este canto en la versión de la Biblia al Día (BAD)
Gen 4:23-24 Lamec dijo a sus mujeres Ada y Zila:
¡Escuchad bien, mujeres de Lamec! ¡Escuchad mis palabras!
Maté a un hombre por haberme herido,
y a un muchacho por golpearme.
Si Caín es vengado siete veces,
Lamec será vengado setenta y siete veces.
¡Vaya canto! En él, Lamec expresa su arrogancia, sus deseos de venganza y el uso de la violencia, de la fuerza bruta. ¿Cómo se puede usar la música para expresar sentimientos tan bajos como la crueldad y la soberbia? Eso mismo ocurre en la música de nuestros días, y basta con encender la radio en cualquier momento para comprobarlo.
Ahora: no perdamos de vista que, aunque Dios es el Creador de la música, entre sus ángeles hubo uno que se distinguió por su esencia musical… y luego por su soberbia rebeldía: Luzbel.
Eze 28:13 En Edén, en el huerto de Dios estuviste; de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio, jaspe, crisólito, berilo y ónice; de zafiro, carbunclo, esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y flautasestuvieron preparados para ti en el día de tu creación.
Del que luego se dice en Isaías:
Isa 14:11 Descendió al Seol tu soberbia, y el sonido de tus arpas.
Tamboriles, flautas, arpas, percusiones, instrumentos de viento y de cuerda pueden ser usados lo mismo para exaltar a Dios que para rebelarse con maldad contra Él, tal como hizo Satanás, tal como muchos músicos que siguen hoy sus disoluciones consoberbia.
No es difícil darse cuenta de que la música es sumamente influyente en nuestra generación, tal como lo fue en los días de Noé. Tampoco es difícil advertir que la música se está usando para expresar todo tipo de ideas, argumentos, sentimientos y valores contrarios a Dios, tanto hoy como en aquellos días.
El mundo actual está seriamente inclinado hacia el entretenimiento. Hoy en día son más reconocidos, admirados y remunerados quienes se dedican a entretener que quienes se dedican, por ejemplo, a educar o a sanar. Actores, deportistas y músicos se cuentan entre los hombres y mujeres mejor pagados de nuestro tiempo.
También es un hecho de que la música mueve al mundo de hoy. Es clarísima la influencia de los músicos, que pueden pronunciarse mediante la música sobre cualquier cosa que deseen. Y así lo hacen, atiborrando los oídos de la gente de sensualidad, con canciones llenas de sexo ilícito, promoción de las drogas, de la rebeldía, de celos, adulterio, violencia y muerte. Nunca como ahora los músicos tienen para sí una plataforma desde la que pueden opinar aún desde la ignorancia sobre cualquier asunto, y no son pocos los que siguen sus disoluciones. Y así, se vuelven soberbios, autosuficientes, llegan a sentirse dioses.
Pero esto no ocurre sólo con los músicos mundanos. Debo decir con tristeza que el espíritu de la música del mundo ha invadido ya a la iglesia de Jesucristo. Nunca como ahora la música cristiana había tenido tanto auge e influencia en la gente. El de la música se ha convertido frente a nuestros ojos en el ministerio más codiciado, entre otras cosas porque es la base de un negocio que produce millones de dólares en ganancias.
Es impresionante ver que los músicos cristianos ganan cuantiosas sumas, que contrastan groseramente con lo que puede tener un maestro de la Palabra o un misionero para su sostenimiento. Y la iglesia de hoy los aclama y les brinda trato especial, los mejores hoteles, vuelos en clase ejecutiva, si no es que los ve llegar en un jet privado y custodiados de guardaespaldas (¿a qué le temen?)
Hoy en día hay cada vez más conciertos cristianos… y cada vez menos enseñanzade las Escrituras. Simplemente compare el número de conciertos y actividades musicales emanadas de la iglesia con el número de seminarios dedicados a la Palabra. La diferencia es abismal. Aún se ha dado el caso de que reconocidos evangelistas están usando un extenso programa musical de hasta dos horas en sus campañas, luego del cual predican apenas unos quince minutos.
Y peor aún, los músicos cristianos están diluyendo el mensaje de la cruz de Cristo, que es ofensivo al mundo, con tal de agradar al mundo. Cada vez se canta menos de Jesús o hasta se omite su nombre, cada vez menos del pecado, del arrepentimiento, de la sangre de Cristo. Algunas canciones supuestamente cristianas llegan a ser tan superficiales que podrían parecer simples canciones de amor entre un hombre y una mujer o, aún peor, entre homosexuales.
Y ahí los tenemos en la radio, en la televisión, en el internet, músicos cristianos hablando sin la menor idea sobre ecumenismo, sobre política, sobre la situación social de tal o cual nación, aún adjudicándose por su propia cuenta el título de voceros de la iglesia cristiana latinoamericana y olvidando su papel como ministros del Evangelio, de Cristo.
Como en los días de Noé, los músicos están cada vez más entregados a la industria del entretenimiento, a darle placer a sus propios sentidos y a los de sus seguidores, a la sensualidad, en lugar de usar la música para lo que fue creada, esto es para darle gloria a Dios, para estar y para conducir a los creyentes a Su presencia.
Es claro: Satanás, el ángel musical por excelencia, ha logrado hechizar a la iglesia. Ha logrado que la música se use como un fin en sí mismo, por lo que muchos se están dedicando a ella en lugar de dedicarse al Señor. Se ha perdido de vista que la música es apenas un medio a través del cual se llega al fin que, en el caso del creyente, es adorar a Dios en total rendición.
Es una vergüenza: el cristianismo de hoy parece girar alrededor de conciertos, en torno a cantantes que simplemente endulzan el oído de sus seguidores con letras “positivas”, y van por el mundo invitando a la gente a ¡divertirse! ¡Y muchos van en pos de ellos, haciendo fiesta alrededor de esos becerros de oro que se han fabricado!
¿Por qué ha ocurrido todo esto? Simple: porque ya lo anunció el Señor, porquenuestros días son como los días de Noé. Mas de esto también ya se expresó nuestro Dios:
Am. 5:21 Aborrecí, abominé vuestras solemnidades, y no me complaceré en vuestras asambleas.
En la Traducción de Lenguaje Actual dice más claramente:
Am. 5:21 ¡Yo aborrezco sus fiestas religiosas! ¡No soporto sus cultos de adoración!
Y agrega, según la versión Reina Valera 1960:
Am. 5:22 Y si me ofreciereis vuestros holocaustos y vuestras ofrendas, no los recibiré, ni miraré a las ofrendas de paz de vuestros animales engordados.
Am. 5:23 Quita de mí la multitud. (del hebreo jamón, esto es ruido, bullicio) de tus cantares,(del hebreo sur, que da la idea de pasear o deambular tocando instrumentos musicales) pues no escucharé las salmodias de tus instrumentos (esto es, los cantos que entonas con tus instrumentos).
Am. 5:24 Pero corra el juicio como las aguas, y la justicia como impetuoso arroyo.
Y aún más:
Am. 6:3 Oh vosotros que dilatáis el día malo, y acercáis la silla de iniquidad.
Am. 6:4 Duermen en camas de marfil, y reposan sobre sus lechos y comen los corderos del rebaño, y los novillos de en medio del engordadero;
Am. 6:5 gorjean (de parat, que significa esparcir palabras, parlotear o tararear) al son de la flauta, e inventan (de kjasháb; que es tramar, por lo general en un sentido malicioso) instrumentos musicales, como David;
Am. 6:6-7 beben vino en tazones, y se ungen con los ungüentos más preciosos; y no se afligen por el quebrantamiento de José. Por tanto, ahora irán a la cabeza de los que van a cautividad, y se acercará el duelo de los que se entregan a los placeres.
El origen y el fin de todo ello es claro en Isaías, de suma maldad proviene y a la destrucción se dirige:
Isa 14:11-14 Descendió al Seol tu soberbia, y el sonido de tus arpas; gusanos serán tu cama, y gusanos te cubrirán. ¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones. Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo.
Que en la versión Palabra de Dios para Todos (PDT) se lee así:
Isa 14:11-14 Al lugar de los muertos vino a parar tu orgullo y la música de tus arpas. Allí te espera tu cama de gusanos y tu cobija de lombrices. ¡Qué caída tuviste desde los cielos, lucero de la mañana! Tú que conquistaste las naciones, ¡cómo caíste derribado por el suelo! Tú que decías: «Subiré al cielo, levantaré mi trono sobre las estrellas de Dios. Visitaré la montaña donde los dioses se reúnen, allá en las laderas del Safóna. Subiré bien arriba, por encima de las nubes más altas y seré como el Altísimo».
Qué pena es ver que muchos de los que se dicen músicos cristianos estén tratando, precisamente, de conquistar las naciones, pero no para Cristo, sino para sí mismos, para sus empresas, para hacer seguidores suyos. Estos, que conquistan para sí la gloria que a Dios le corresponde y aún se deleitan en que el mundo los premie, aún serán derribados por el suelo si no proceden al arrepentimiento.
Concluimos pues que en los tiempos de Noé la música llenaba la vida de la gente, usada ésta para el gusto y el esparcimiento, para los deleites temporales de la carne y el pecado, en medio de una generación absolutamente alejada de Dios.
Y que nuestros días son como aquellos: hoy la música mueve al mundo, tanto fuera como dentro de la iglesia, donde tristemente ha desplazado aún a la predicación del Evangelio. El espíritu musical del ángel caído no sólo controla al mundo, sino que también ha invadido ya claramente a la iglesia.
Pero, queridos hermanos, siendo esto un signo inequívoco del cumplimiento de las palabras de Jesús sobre los tiempos finales, cobremos ánimo en que, precisamente por ello, ¡el regreso de Jesús está a la puerta!
Apenas un poco más y el que ha de venir… vendrá.